Salir de la rutina, conocer nuevos lugares, aprender de nuevas culturas, respirar diferentes aires y mirar nuevos colores, son importantes para tener una adecuada salud física y mental. En definitiva, viajar es uno de los placeres sencillos que te aporta felicidad en grandes cantidades.
Es importante resaltar que al viajar rompes costumbres sedentarias a las que puedes estar acostumbrado. Por lo general, en este tipo de actividades tú te encuentras más activo físicamente si hacemos una comparación a la vida que llevas cuando estás dentro de tu ritmo diario: casa-trabajo-casa.
Viajar es sinónimo de explorar, volar, trasladarse y vagar. Es un espacio de tiempo en el que te olvidas de tus responsabilidades cotidianas para ocuparte de divertirte, descansar, conocer, enriquecer tu alma y tu espíritu.
¡Anímate a comerte el mundo! Por si no lo sabías, las personas que acostumbran viajar, tienen menos probabilidades de morir jóvenes. Esto se da porque están menos estresados, son más felices y tienen dentro de sus proyectos de vida conocer mucho más el mundo.
¿Quieres olvidarte de todas responsabilidades que te están estresando cada día más? La solución es volar y viajar. Cuando lo haces, la cantidad de cortisol en el cuerpo reduce significativamente. Esta hormona es la del estrés, así que entre más logres desecharla, mucho mejor para ti.
Para terminar te podemos decir que durante el tiempo que estás fuera de tu ciudad, tú dejas atrás ese lado gruñón y quejumbroso que normalmente eres y empiezas a explorar una nueva faceta de tu personalidad. Así que no le temas al dejar tu casa, tu ciudad, tu familia, tus costumbres y vivir una experiencia diferente.
Date la oportunidad de aprender y conocer ¡adelante!