بسم الله الرحمن الرحیم
Ahora tenemos una característica especial en este día glorioso, celebrado como Mab’ath o resurgimiento del bien y la justicia.
El sagrado Corán nos informa en aleya 164 de Surah Aal-e Imran:
En verdad, Dios agracia a los creyentes al designar un Mensajero de entre ellos mismos, que les recita Sus versículos y les purifica y les instruye en la Escritura [Sagrada] y en la Sabiduría, cuando antes estaban en un extravío evidente.
El descenso del Arcángel Gabriel con la encomienda formal de la misión divina al Profeta Muhammad (BP) de 40 años, mientras estaba absorto en oración y adoración en la Cueva Hera en el Monte Noor fuera de La Meca comienza un nuevo capítulo en la historia de la civilización. Es el día que revolucionó el mundo, que estaba pasando por una coyuntura crítica, con la ignorancia y la injusticia extendidas por todos lados. Hubo una opresión generalizada, violación de derechos, discriminación contra las mujeres, corrupción, explotación de los débiles, búsqueda de deseos carnales y adoración de ídolos, fuego, espíritus y las fuerzas de la naturaleza. La Península Arábiga se había hundido a su nivel más bajo. La superstición, incluido el infanticidio, era algo cotidiano. La situación caótica se podía medir a partir de lo que una persona llamada Qays ibn Assem, al ser iluminada con el mensaje del Islam, le vino al Profeta Muhammad (BP) y admitió: Oh Mensajero de Dios, en los días de Yahilia (Ignorancia) enterré vivos ocho de mis hijas por miedo a la vergüenza, ya que al crecer me podían haber traido la desgracia en ese ambiente de inmoralidad.
El Profeta se sintió ofendido al oír esto mientras las lágrimas brotaban de sus ojos. Él fue enviado por Dios como «Misericordia para toda la creación», como el Sagrado Corán nos informa en aleya 107 de Surah Anbiya (Y no te hemos enviado sino como una misericordia para toda la humanidad). Por lo tanto, se esforzó por disipar las tinieblas de La Meca, Medina, Hijaz, la Península Arábiga y, finalmente, todo el mundo, ya que la ignorancia, la arrogancia, la irracionalidad, la inmoralidad y el culto a los ídolos no se limitaban a los árabes, sino que tierras civilizadas. La situación de la sociedad persa era caótica con la injusticia en todas partes a medida que los gobernantes subían y bajaban, y la clase sacerdotal zoroastriana imponía culto al fuego y fuertes impuestos al pueblo. En los imperios romano y bizantinos cristianizados, la gente se había desviado por mucho tiempo del mensaje monoteísta del Mesías nacido en la virgen y adoraban a la Trinidad. En la India, el sistema de castas discriminatorio y la multiplicidad del panteón de las deidades estaba a la par con los árabes, si no peor. En China, la dinastía Sui, que afirmaba seguir las supuestas enseñanzas pacíficas del Buda se había embarcado en uno de los peores baños de sangre de la historia. Los turcos estaban inmersos en el chamanismo, y los africanos en la región subsahariana en el animismo. Para citar al Imam Ali (AS) de su sermón 89 del Nahj al-Balagha:
«Alá envió al Profeta – Muhammad (BP) – después de que la misión de otros Profetas se había detenido y los pueblos estuvieron dormidos durante mucho tiempo. Los males estaban levantando cabezas, todos los asuntos estaban bajo disrupción y en llamas de guerras, mientras que el mundo carecía de brillo y estaba lleno de abierta falsedad. Sus hojas se habían vuelto amarillas y había ausencia de esperanza acerca de sus frutos y su agua había pasado a la clandestinidad. Los minaretes de orientación habían desaparecido y habían aparecido signos de destrucción. Fue severo con su gente y frunció el ceño frente a su buscador. Su fruto era vicio y su comida era canal. Su vestido interior era miedo y la cubierta exterior era espada «.
La invitación del Profeta Muhammad (BP) al Islam se basó en el intelecto y el razonamiento. El sagrado Corán llama a todas las personas a pensar, reflexionar y aceptar lo que el intelecto confirma. El Profeta infundió en la gente los beneficios de la racionalidad y desistió de las supersticiones. Por ejemplo, cuando su hijo pequeño, Ibrahim falleció, el Profeta lloró y lo dejó descansar. Cuando un eclipse solar ocurrió ese día, prontamente dijo que no era una gran calamidad ni por la muerte de su hijo, sino que era parte de las leyes de Dios relacionadas con los fenómenos de la naturaleza. Estos son todos signos de la Majestad de Dios. A través de tales palabras y su comportamiento personal, él sentó el precedente para meditar y pensar apropiadamente entre los musulmanes para que se esfuercen por descubrir las maravillas de la creación a través del estudio, la investigación y el análisis de la naturaleza y el medio ambiente. Es el intelecto y su uso apropiado lo que nos enseña a descubrir la Unicidad de Dios Todopoderoso, la misión del Profeta y la revelación del Sagrado Corán. Es el intelecto el que nos ayuda a distinguir la verdad de la falsedad, el bien del mal y la virtud del vicio. Este es el dinamismo del Islam.
Sobre la importancia del intelecto a la luz del sagrado Corán, el filósofo islámico, Allamah Seyyed Mohammad Hussain Tabatabaie ha dicho: «Si estudiamos el sagrado Corán, veremos que más de 300 aleyas invitan a la gente a pensar y reflexionar para descubrir la verdad y evitar el mal. En vista de este hecho, el Profeta Muhammad (BP) hizo hincapié en la contemplación y la búsqueda del conocimiento, incluso si se encuentra en un lugar distante. Su famosa expresión todavía resuena claramente para nosotros: «Busca el conocimiento, así sea en la China (un lugar lejano de Arabia). El Profeta le dio gran importancia a la adquisición de conocimiento. Se ha narrado que una vez durante una batalla, cuando los musulmanes tomaron varios árabes y paganos cautivos, entre ellos algunas personas alfabetizadas, el Profeta prometió liberar a los infieles alfabetizados a condición de que enseñaran a leer y escribir a los musulmanes. Tan brillante fue su movimiento que no solo los musulmanes comenzaron a adquirir alfabetización, sino que muchos de los politeístas liberados, más tarde decidieron abrazar la verdad del Islam, impresionados por su racionalidad. En vista de estos hechos innegables, es desafortunado que algunos elementos desviados, que se llaman a sí mismos musulmanes, ataquen sin sentido los centros educativos y eviten que niños y mujeres aprendan. Estas personas desviadas atribuyen sus malas acciones a la reactivación de la sunnah del Profeta, mientras que de hecho están siguiendo las malas costumbres de los árabes paganos.
Recientemente, un grupo en Nigeria ha secuestrado a unas 300 colegialas inocentes acusándolas de que su educación se basaba en fuentes no islamicas. Estos elementos desviados parecen ignorar el hecho de que el Profeta contrató los servicios de no musulmanes para enseñar a los musulmanes a leer y escribir. Además, hizo un llamado para buscar conocimiento de China, un país que en aquellos días estaba científicamente avanzado, como el Oeste de hoy, pero carecía de musulmanes. Los verdaderos musulmanes deberían evitar a grupos heréticos como los wahabíes, los salafistas y los takfiris, que están distorsionando la imagen del islam. De hecho, es un gran honor para nosotros ser musulmanes que se adhieren al sendero del profeta Muhammad (BP) y los imames infalibles de su Ahl al-Bayt (P), que fueron faros de luz y depositarios de conocimiento y sabiduría. Solo el Islam genuino nos enseña a construir sociedades moralmente sanas y pacíficas, donde se pueda establecer justicia y se eliminen todas las formas de corrupción y opresión. Solo entonces el Islam influirá en los corazones de los no musulmanes y de todos los demás buscadores de la verdad. Una vez más, le ofrecemos las más sinceras felicitaciones en el Día de Mab’ath, el nombramiento formal del Profeta Muhammad (BP) como el último y más grande Mensajero de Dios con el mensaje universal del Islam.
TRADUCIDO POR EL EQUIPO ISLAM AL-FAYER
ISLAM AL-FAYER 